¿QUÉ SON LOS PFOS Y PFOA?

Publicado en Actualizado en 24/08/2023

Los PFAS son un grupo de compuestos tóxicos, capaces de acumularse en el organismo, los  cuales perjudican esencialmente al medio acuático. Los compuestos PFAS ya forman parte  del agua de consumo, al igual que otras sustancias tóxicas, y el tratado de las aguas para su  eliminación es un grave problema para las plantas de tratamiento de aguas y las empresas  suministradoras.  

Los compuestos perfluoroalquilados (PFAS) representan un grupo de alrededor de 5.000  sustancias químicas que son sintetizadas por sus propiedades resistentes al agua y al aceite.  Dentro de este grupo se encuentran dos compuestos, el PFOS y PFOA, que pueden producir  daños significativos para la salud a partir de determinadas concentraciones. Por este motivo,  fueron introducidos en 2009 en un tratado internacional que controla el tratamiento de  sustancias tóxicas, el Convenio de Estocolmo.  

PFOS es la abreviación de sulfonatos de perfluorooctano. Son sustancias sintéticas que  emplean las industrias para impermeabilizar los productos del agua, la grasa y la suciedad. Estos tóxicos, mediante las aguas residuales de las fábricas, pueden llegar a contaminar las  aguas de consumo urbano. Las concentraciones de PFOS que suponen un peligro para la salud  aun no se han fijado, pero estar expuesto a 5 µg/l puede acarrear problemas a la salud. 

El PFOA, conocido también como ácido perfluooctanoico, es un compuesto artificial y  altamente tóxico, empleado en distintos productos desde los años 40. Muchos productos  como, tejidos impermeables, ordenadores, sartenes antiadherentes, papel de horno y hasta  cajas de pizzas, contienen esta sustancia. Este compuesto puede adherirse a la comida al  cocinar con utensilios de cocina que lo contengan o pasar al aire al someterse a altas temperaturas. En el caso de los PFOA, estar expuesto a concentraciones a partir de 2 µg/l ya  puede suponer un peligro para la salud. En julio de 2020 la Unión Europea prohibió el uso de  este compuesto. 

Según un estudio, la población española del noreste y noroeste de la Península Ibérica, presentan una mayor exposición a los PFAS y, en el resto de la población española, se ha  revelado que se superan los niveles límites de HBM-I de los PFOS establecidos por la Comisión Alemana de Biovigilancia Humana, por tanto, es recomendable seguir un control del grado de  exposición al que pueda estar sometida la población.

En cuanto a los efectos sobre la salud, la exposición a sustancias PFOA y PFOS, en  determinadas concentraciones, podrían ocasionar efectos adversos para la salud como problemas en el desarrollo del feto durante el embarazo o en bebés amamantados, afecciones  al hígado, problemas inmunológicos o de tiroides, también enfermedades como cáncer,  esterilidad, entre muchos otros.  

Para reducir el PFAS del agua potable de su casa se puede tomar alguna medida. Eliminar las  sustancias PFAS del ciclo urbano del agua es trabajoso, costoso y supone una problemática para el sector del agua en su camino hacia la neutralidad climática, ya que las tecnologías que  usaría una EDAR (Estación Depuradora de Aguas Residuales) sería insostenible para el medio  ambiente, por tanto, la medida más eficaz y viable, además de cómoda y segura para la salud,  es la utilización de filtros o dispositivos para el tratamiento del agua, de este modo, Zero  Water será su mejor opción para deshacerse del PFAS existente y tomar agua de excelente  calidad. Los filtros de algunas marcas no tienen la capacidad de filtrar este y otros tóxicos, por  ello, nuestros filtros Zero Water son los más recomendables ya que filtran el 99% de todos los  tóxicos que se puedan encontrar en el agua de su grifo.

ESTEFANÍA MARÍA VAN DEN UDENHOUT MOLINA